Risazepam

¿Alguien en la sala tiene ansiedad? Hoy vengo a presentar un nuevo psicofármaco para sobrevivir en estos días, el Risazepam.

La ansiedad, en niveles moderados, es una respuesta de nuestro organismo que nos prepara ante situaciones que requieren de nuestra activación. Por ejemplo, ante un examen igual de malo sería estar super relajado como super activado porque ambos estados provocarían que nuestra concentración y nivel de atención no fueran los adecuados para responder correctamente.

Sin embargo, hay ciertos estímulos o situaciones que generan demasiada activación en nosotros, y acaban provocando un miedo excesivo. En los trastornos de ansiedad, nuestro organismo ante un estímulo externo o interno empieza a sobreactivarse. A partir de ahí, podemos sentirnos demasiado agitados, que nuestra tasa cardíaca se acelera, que empezamos a sudar, tenemos dificultad para respirar... En este momento, nuestro cerebro sobre interpretará estos síntomas, y empezará a enviarnos mensajes poco realistas. En casos ya patológicos y graves podríamos hasta sentir que nos está dando un infarto, nos estamos ahogando, o incluso que podemos llegar a morirnos. 

En estos días, es normal que muchas veces nos sintamos amenazados porque nos sentimos encerrados, porque sentimos que no podemos cambiar nada por mucho que queramos, porque hay situaciones fuera que nos superan, porque tenemos familiares hospitalizados y no podemos ir a visitarles, porque nos sentimos desinformados, porque surgen conflictos en la convivencia (y aquí cada uno puede añadir un sinfín mas de situaciones personales)... En definitiva, porque la situación actual es estresante y en estas condiciones es difícil encontrar una vía de escape en la que poder soltar toda esa tensión. Y, además, somos conscientes de que esa hiperactivación va a seguir durante días y tenemos sentimos miedo por no saber cómo controlarla en el futuro.  

Hasta aquí, lo primero es ser conscientes de que tarde o temprano todos nos vamos a sentir, si no nos hemos sentido ya, demasiado agitados y con falta de control sobre nuestro día a día. Porque el simple hecho de solo salir uno a la compra y bajo unas medidas específicas ya nos quita parte de nuestra rutina que antes solo estaba bajo nuestros mandos. Lo que muchas veces hacemos es evitar el peligro o no enfrentarnos a él, pero esto no hace que desaparezca.  

Sin embargo, hay otras opciones. En la situación que nos acontece estos días, lo que podemos hacer es ver la ansiedad como una respuesta natural de nuestro organismo porque se siente oprimido, y necesita la activación tan alta a la que le tenemos acostumbrado. Pero, claro a nadie le gusta sentir esa agitación, falta de control, miedo al miedo, ¿verdad? Bien, pues mi remedio va hacer que todo ese estrés que está acumulado salga y así nuestra ansiedad pueda disminuir. Hay una forma más tradicional que es controlar nuestra respiración o hacer ejercicios que nos permitan tener conciencia de nuestras sensaciones internas. Sin embargo, me voy a atrever con otro método, y lo vamos a hacer con más activación, pero esta vez de una carga emocionalmente positiva. 

Os presento al RISAZEPAM. ¿Alguna vez os ha pasado que os han hecho tantas cosquillas que parecía que no podíais respirar ni hablar? ¿Habéis visto un vídeo que os ha hecho tanta gracia que luego parecía que llevabais una hora haciendo abdominales? En estos momentos podéis haber sentido la misma agitación a nivel físico que cuando sentimos ansiedad, sin embargo, nuestro cerebro es capaz de reinterpretar esas señales físiológicas y convertirlas en algo placentero.

¿Estás dispuesto a medicarte? 
  • Qué es y para que se utiliza: Risazepam es un fármaco que directamente actúa sobre el cerebro para producir una sensación placentera cuyo síntoma principal es la risa. El efecto que pretende conseguir es una disminución del estrés y la sensación de ansiedad.
  • Cómo tomarlo: Póngase un vídeo de su móvil con grandes momentos para rememorar (bailoteos, fiestas, bromas, veranos, familiares o amigos que dan la nota...), cuente un chiste un chiste en cualquier momento (antes asegúrese de que es medio bueno), póngase a bailar con algún familiar, desempolve los juegos de mesa y empiece a utilizarlos, mire fotos o vídeos de cuando era pequeño, monte un "houseparty" o una buena conversación por Skype en el que nunca falten las buenas anécdotas... [Si quiere saber más formas, empiece a tomarlo y espere al momento adecuado]
  • Dosis: Cuanto más mejor, al final mi objetivo es vender, así que cuanto más lo uses más acabaré ganando.
  • Posibles efectos adversos: Fuerte adicción y patas de gallo a medio/largo plazo. Pero a largo plazo, según numerosos estudios empíricamente demostrados, se ve fortalecimiento de los abdominales (en algún caso puede llegar al nivel de tableta), bienestar dentro de tu red social (amigos, familiares y hasta vecinos) y gran probabilidad de contagio (pero tranquilo que en vez de aislarte, te lo agradecerán).
  • Contraindicaciones: Las personas que no se contagian tienen gran peligro de ser excluidas.
  • Avise a su farmacéutico si no nota mejoría al cabo de unos segundos mientras comienza a reírse.
Y por si fuera poco, os traigo a un personaje público que ayer mismo recomendaba su uso. Ya sabéis que muchas veces tratamos de imitar a los otros, y más a figuras con cierto renombre como Pablo Motos. Mi momento de Spam en el El Hormiguero fue cuando decía que el humor podría ser la única herramienta que "te salva cuando algo no tiene solución" porque "ablanda la vida, anestesia los problemas y te da poder". Y aunque "ahora mismo se mezcla mucho con la desesperación, ya empieza a salir poco a poco".

Así que, ¿a qué estás esperando? Contágiate ya, y te quedarás en casa, pero acompañado con un mayor bienestar y por qué no, empezarás a ser un poquito más feliz. Y me atrevo a decirte, que si no quedas satisfecho te devuelvo el dinero.

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Brindamos por ti Antoñito

Mirar más allá

Querida Rutina: